Sobre la vida o la existencia es difícil calcular cuanto de
las dos es la mas importante. Pero no se deja de creer que la vida es la existencia
misma de nosotros en un mundo por conocer. Pero si no es eso, entonces puede
ser la razón de estar sentados frente al computador leyendo esto. No lo creo.
Algunas veces en mi vida he pensado que las cosas que hago están mal ante los
ojos de los demás. Pero eso que importa, si al fin y al cabo es mi existencia
lo que me juego todos los días, intentando encontrar un camino hacia lo que,
mis sueños creen que deben llevarme. Hay cosas que quisiéramos cambiar,
pensamientos que son hipotéticos y que tampoco queremos confirmar, pero la vida
misma se encarga de mostrar, que estamos algo mal, muy mal o sencillamente
bien. Pero ¿Por qué tenemos esa tragedia de pensar que todo es malo?, será que
creemos que tenemos que aprovechar cada uno de los minutos en que respiramos
para no morir, esperando ser aprobados por nosotros mismos como alguien que
vale la pena conocer.
Regresemos de nuevo a la existencia, no soy filosofa o
alguna cosa parecida, solo soy una mujer (por mi edad y sexo) que intenta
buscar entre los escombros de su mente la fortaleza para estar sentada
escribiendo esto. La convicción humana es extraordinaria, por eso hago esto,
por un poco de ese pensamiento que desde hace tiempo tengo en la cabeza, seguir adelante, pero dejando atrás mis
sueños. Y uno se pregunta ¿Qué hace la gente que no tiene sueños? Mirar los
días pasar esperando que algo cambie. Que ese chip o palanca en la existencia
este para lo que deseamos. Pensado que
es mejor no creer en cosas imposibles, porque tortura la mente. Tal vez mi
problema tan personal sea que aspiro a mucho y hago poco, o que simplemente soy
alguien tan normal y corriente, que mi escapatoria para eso es creer que soy
alguien inteligente, interesante o alguien con quien tener una conversación sea
agradable. Es más creer que realmente soy diferente del montón. ¿Será ese el
mecanismo de defensa que mi mente tiene que cambiar para las cosas que están
mal?, no lo creo.
Mis fantasías infantiles o maduras (cada quien piénselo como
quiera) son un sustento de mi existencia. Pero esperar a esa aprobación de mi
vida para realizarlas es algo complejo, difícil de explicar. Es como esperar que
el bus pase porque tiene el dinero en la mano, no sé, algo así por el estilo.
Querer hacer, comprar, tener, aprender, etc. Son cosas que tenia en mente hace
algunos días, pero ver que mi realidad es otra, abrir los ojos, así no se vea
nada pero todo este claro, ver que lo que fallaba para mi era yo misma. Creía
tener una mente fuerte, después de los miles y un sucesos que he vivido, me di
cuenta que no. Porque no soy capaz de sostener mis ideales, mis sueños y mucho
menos creer que yo, la que escribe esto puede ser atractiva mental y
físicamente para alguien. No tengo el cuerpo escultural que podría rellenar mi
falta de existencia, tampoco mi mente, la cual le falta recorrer mas caminos
para llegar a tener algo en que destacarme, solo un poco.
En algo soy afortunada, pero de igual forma no es el tema de
hoy. Al final el tema es la aceptación
de mi realidad y afrontarla dejando de creer que soy algo que no soy. Me
pregunto mirando por la ventana ¿Cuándo me creí algo que no soy?, ¿En que
momento de mi vida confié en que realmente era algo diferente? No lo sé. Es
extraño, confuso y difícil. Ver la vida como la existencia de la mente sobre el
filo de los sueños y la locura. Ver desde el precipicio e intentar luchar por
no caer. Pensar que esto lo hago porque no se como hacerlo entender, y saber
que al final usted se va a quedar mas confundido que yo o más seguro que algo
en su existencia vale la pena. O que sus sueños son tan realizables como un
café en la mañana. O que simplemente pensará que loca o que tonta. Si usted no
sabe que es debatirse entre estar de caminado o morir en la cama, no piense
nada y deseche lo leído. Puede dejarme a mi con mis debilidades buscando
respuestas o afirmar hipótesis que nunca se debieron plantear.